DOS MUJERES, UN CAMINO DE FE

Presento brevemente el perfil de dos mujeres que vivendo la fe cristiana se han puesto al servicio de los demás.

Zilda Arns, fundadora y coordinadora de la Pastoral de la Infancia de Brasil, fue una de las tantas víctimas del reciente terremoto que devastó Haití. La Dra. Zilda estaba en Haití participando de la Conferencia de los Religiosos de los Países Caribeños y también para motivar a los líderes y voluntarios de la Pastoral de la Infancia en Haití que trabajan con niños, embarazadas y familias.

Zilda Arns, pediatra, madre de cinco hijos y viuda desde 1978, dedicó toda su vida a la caridad cristiana a través de causas humanitarias y solidarias.

En 1983, Zilda fundó la Pastoral de la Infancia, organismo ligado a La Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB), que tiene como objetivo el desarrollo integral de los niños pobres. Hoy cuenta en Brasil con 261.000 volontarios (en su mayoría mujeres), que atienden a más de 1,8 millones de niños (desde el nacimiento hasta los seis años), y 95.000 madres gestantes, en más de 42.000 comunidades y en 4.066 municipios. Reconocida como "Heroína de la Salud Pública de las Américas", en 2002, por la Organización Panamericana de la Salud, en 2001, Zilda Arns había sido candidata al Premio Nobel de la Paz.

Flaminia Giovanelli fue nombrada subsecretaria del Pontificio Consejo para la Justicia y la Paz. La idea de crear tal organismo nació en el Concilio Vaticano II con el fin de promover el desarrollo de los países pobres y la justicia social internacional según indica la constitución Gaudium et spes. Tal nombramiento muestra la confianda de la Iglesia y del Papa en la mujer.

Giovanelli no es una persona nueva en dicho dicasterio. Lleva trabajando allí desde 1974. Estos años le han permitido ver de cerca los cambios políticos en muchos países europeos y latinoamericanos. Pero también esto le ha llevado a conocer mejor a la Iglesia, a la que sirve.

Considera que entre las tareas primarias del Pontificio Consejo se encuentran: continuar reflexionando sobre la última encíclica de Benedicto XVI Caritas in Veritate, intervenir por la libertad religiosa especialmente en los países donde tantos cristianos sufren más persecuciones y afrontar el desafío de las migraciones en el mundo.